Esta semana
comparto con ustedes mis conocimientos y experiencia acerca de las citas
on-line. Gregg y yo nos conocimos on-line 12 años atrás, cuando este timpo de
cosas recién estaba comenzado. De verdad digo que yo nunca esperé conocer a mi
esposo on-line. Incluso, me daba vergüenza admitir que estaba participando de
un sitio de citas on-line!
No había escasez de
hombres
Después de la Universidad, viví en un
área metropolitana en la que había cantidad de hombres solteros. De hecho,
estaba rodeada de hombres solteros tanto en mi vida social como en el trabajo.
Incluso yo tenía una vida social muy activa en una comunidad católica integrada
tanto de personas casadas como solteras. ¡Conocía a muchísima gente! Por lo
tanto, estadísticamente, debería haber encontrado a mi esposo en ese ambiente.
Salí un montón con chicos y tuve 3 noviazgos que los pondría en la categoría de
“casi compromiso de matrimonio”. Pero, ¡ay!, yo
seguía soltera.
¿Por qué las citas
on-line?
Me registré en un sitio Católico de
citas on-line, ante la insistencia de una amiga mía. Ella era una valiente
chica de Nueva York y me dio simplemente el empujón correcto para hacer esto.
Yo tenía grandes expectativas al principio porque tenía una creencia
fundamental: tenía mucho para ofrecer. En tono chistoso describo mi decisión de
participar en las citas on-line como “lanzarme al mercado nacional”. Mi slogan era: "¡Que gane el mejor!”.
Pero, luego tuve citas con los chicos
que iba conociendo on-line y mis expectativas bajaron. Después de un tiempo,
comencé a ver esto simplemente como una forma “complementaria” de conocer
hombres.
Algo que pensaba acerca de las citas on-line era que se trataba
de hombres que buscaban matrimonio (un asunto que era la mitad de los problemas
que tenía con los hombres que conocía en la vida real con los que que había
estado saliendo). Sin embargo, encontré que aunque los chicos on-line podrían
haber estado buscando el matrimonio, ninguna de estas relaciones progresaba
hacia el matrimonio (ni siquiera remotamente). Entonces, me desilusioné. No me
malinterpretes, los chicos me fueron contactando y llevando a citas pero no
eran personas en los que yo estuviera interesada. Salir con ellos se sentía forzado.
Llegué a un punto en que sólo entraba
al sitio los lunes para responder los mails que recibía de estos chicos. Pero
entonces, un glorioso lunes, ingresé en él y encontré un email de Gregg, mi
amado. Decía: “Basta con sólo una sola persona”, es cierto.
¿Una acción
desesperada?
¿Son las citas on-line una acción
desesperada? Si es así, fue la mejor acción desesperada que he realizado en mi
vida! ¿Me sentí desesperada y horrible en ese entonces? Sí. ¿Me importa eso
ahora? No demasiado. Si no lo hubiese hecho, tengo sensación de que aún
seguiría soltera. Y ningún hombre es mejor para mí que Gregg.
Yo se que podrías pensar que las
citas on-line es para los “desahuciados” pero puedo hacer una recomendación
para aquellas de ustedes que se burlen de esto? Velo como una forma
complementaria de conocer hombres. Enfóquenlo como una manera para Dios de
trabajar en tu vida sin limitarlo a Él a la zona donde vives. No pongas todas
tus esperanzas y sueños en esto, pero sí permanece abierta a intentarlo.
Sugerencias para
las citas on-line
Ya que mi "Formula de Respuesta" no
funcionaría en el mundo virtual, aquí están mis sugerencias para las citas
on-line:
Deja que él te escoja a ti: Yo nunca elegí
o eché un vistazo de los chicos que estaban en el sitio, sólo respondía a
aquellos que me habían buscado y enviado notas. De esa manera, yo sabía que
ellos me habían escogido a mí.
Ingresa al sitio
una vez por semana: Llegué a un punto en que sólo revisaba mi bandeja de entrada los
lunes. Esto frustraba mucho a los chicos un poco pero nos prevenía de caer en
una relación sólo por e-mail. Esto los forzaba a ellos a llamarme si deseaban
interactuar conmigo e invitarme a salir. Pienso que esto además mostraba que yo
tenía una vida más allá de las citas on-line.
Continué esta práctica con Gregg
también, lo cual es motivo de que hayamos tenido un comienzo lento. ¡Pero esto
no lo desalentó! Supe al tiempo que él
revisaba su bandeja de entrada en espera de mi respuesta, mientras yo
continuaba con mi vida. No tenía idea de que él iba a ser “el indicado”! Por
eso, lo traté simplemente como a cualquier otro chico… hasta que él se
distinguió del resto por lo maravilloso que resultó ser.
Es un asunto tuyo: Excepto a mi amiga
de Nueva York, no le conté a nadie de que estaba participando en citas on-line.
Incluso le dije una mentirilla piadosa a mi mamá acerca de cómo lo conocí a
Gregg, y solamente conté a mis padres la verdad porque iba a volar hasta Kansas
a visitarlo. Sí, me comporté de forma un poco extraña con respecto a esto.
Por lo tanto, si te sientes como
desesperada, horrible y desahuciada por
probar las citas on-line, simplemente no le digas a nadie. Sólo recuerda
las “reglas de seguridad” para las 3 primeras citas (encontrarse en un lugar
público), ir por tu cuenta (no en su auto), y mantenerte alerta ante cualquier
situación extraña).
Nota de ATTLDL: Si te decides a intentar
citas on line sé muy cuidadosa, usa sitios católicos reconocidos, y sólo si eres
mayor de edad.
Tómalo como algo
complementario: Considéralo como una manera de mejorar tu habilidad de conocer hombres. No
te cierres solamente a la vida real o solamente a la actividad on-line. ¡Permanece abierta al movimiento del Espíritu
Santo!
No uses mucho el chat: En otras palabras, se amable y dulce pero a la vez relajada. Tú no
deseas que él mantenga solamente una relación electrónica contigo. Si el
continúa en un nivel “débil”, puedes escribirle luego de un par de intercambios
electrónicos y decirle: “Prefiero no usar el e-mail . ¿Te gustaría llamarme?”
No te conviertas en su "amiga de
confianza". El chico debería encaminar las cosas hacia la parte de citas en
lugar de llamar por teléfono o mandar mails como si fueras una amiga. El
debería desear mirarte a los ojos, ver tu sonrisa y sentir tu aroma al salir
contigo! J
Larga distancia: Esto puede ser
difícil pero, obviamente, no imposible. Al chico puede que le dé miedo realizar
una primera visita. Es rmuy cierto que el movimiento de liberación femenino ha
dañado la caballerosidad del hombre. Puede que él no quiera ahuyentar a una muy
buena chica sugiriéndole visitarla.
Historia real: Gregg y yo vivíamos a
gran distancia el uno del otro. Una vez que nuestras interacciones pasaron a
las conversaciones por teléfono, y yo pude decir que era un buen chico (¡oh, y
que amaba su voz!), yo quise que nos conociéramos en persona. Entonces, después
de casi un mes, dulcemente dije: “¿Cuándo vas a venir a visitarme?”.
Mi objetivo al compartir esto es que
tú no necesitas ser o tímida. Puedes manifestar lo que quieres en una relación.
Los chicos no pueden leer tu mente y ellos no tienen las pistas visuales que
tendrían en persona. Si le dices a él: “¿Te gustaría llamarme?” O “¿Cuándo vas
a venir a visitarme?” y él no
Gregg deseaba visitarme y él estaba
muy feliz de que yo le huniera dado la oportunidad! Con el chico correcto,
funcionará. Con el incorrecto, no funcionará. Te dejará sintiéndote necesitada
y estúpida. Pero, es preferible a quedar atascada en una relación en la etapa de
email o telefóno.
¿Preguntas?
Si estás frecuentando las citas
on-line y tienes preguntas específicas
hacerme, siéntete libre de escribirme o (si te sientes con coraje) escribe
tu pregunta en el espacio para comentarios.
Nota de ATTLDL: ¿Quisieras preguntarle algo
Cindy en español? Contáctanos.
Dios te ama y te bendice!
Cindy